En este blog he repetido hasta la saciedad que ni en el Tratado de Utrech -ni ningún otro posterior que haya tenido lugar- España ha concedido a Inglaterra la plaza de Gibraltar en concepto soberano, es decir, España le transfirió la propiedad del Peñón pero nunca los derechos inherentes que conlleva la soberanía sobre cualquier territorio, en este caso el Peñón de Gibraltar, tales como derechos marítimo, espacio aéreo y propiedad del subsuelo, propiedad esta última inherente al Estado Español desde los tiempos de Alfonso XI, rey de Castillo y León (1311/1350) dispuesto a través de la Ordenanza de Alcalá 1348 por la que se arrogó la propiedad del subsuelo de todo el territorio bajo su corona.
No obstante no existir documento alguno que constate y demuestre que España en algún momento otorgó a Gran Bretaña la soberanía sobre el Peñón por lo que nunca ha ostentado Gran Bretaña dicha soberanía, políticos españoles en el Palacio de Santa Cruz, y en otras instancias, instan a Gran Bretaña de forma machacona que "devuelva a España la soberanía del Peñón", contradiciendo con ello lo estipulado en el Tratado de Utrecht, artículo X párrafo 1º y parte del 2º, tanto en la letra como en el espíritu de su contenido. España ha estado dispuesta en la época del Gobierno de Aznar a compartir con Gran Bretaña dicha soberanía. Este disparate y otros de no menor calado han salido del Palacio de Santa Cruz, sobre todo con los inquilinos Morán y Moratinos.
Ahora, en el punto que Gran Bretaña ha decidido dejar la Europa Comunitaria porque no cuadra con sus intereses, Gibraltar cobra el significado y la importancia que nunca dejó de tener y es, simplemente, que es España, parte intrínseca de España, y, al igual que Honkong (su permanencia ligada al mismo tratado o contrato standard de la época colonial inglesa), no tiene en el siglo XXI ninguna razón de permanecer, especialmente cuando el poder colonial, Gran Bretaña, decide abandonar la UE por su conveniencia. Lógicamente, los llanitos han tomado conciencia que su situación con relación a la UE ha cambiado, y, por consiguiente, con España; esta última, tan pródiga en hacer concesiones a los gobiernos de Gibraltar durante etapas de gobiernos socialistas, a resaltar las etapas de Morán y Moratinos, se encuentra ahora ante una realidad histórica que es la cruda realidad para los llanitos de tener que aceptar lo que realmente son, una población de gente de aluvión sin patria que sigue renegando del país que les da suelo y sustento: España.
El momento ha llegado de que se imponga la realidad de la naturaleza de Gibraltar y que su población sea acogida por el resto de España con todas las prerrogativas como españoles; lógicamente, el chollo de las múltiples líneas telefónicas para las apuestas y juegos de azar, los contrabandos y más zarandajas ilegales tienen que tener un final.
A continuación inserto un enlace a las declaraciones del exministro Margallo al digital "moncloa.com" con relación a las negociaciones que lleva el ministro Borrell sobre Gibraltar a cuento del Brexit.
También inserto un enlace de descarga gratuita de mi libro "Gibraltar......¡por siempre Gibraltar!; es una recopilación de artículos durante años, entre ellos un capítulo dedicado a la importancia que tuvo Gibraltar en la Segunda Guerra Mundial, especialmente en Europa.
Margallo acusa a Borrell de “rendirse” en la negociación de Gibraltar• El exministro censura a su sucesor por vender "puro humo" con el futuro de la colonia.
• "En síntesis, las reclamaciones españolas son puro humo", sentencia Margallo.
• Propone recuperar las discusiones sobre la cosoberanía del Peñón.
“España ha declarado que la cuestión de la soberanía no está sobre la mesa, lo que supone rendirse antes de empezar a jugar”